viernes, 21 de mayo de 2021
El uso de semilla genéticamente modificada ha impulsado la producción de algodón en México y en todo el mundo con el 90% de su superficie, pero desde 2019 la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ya no ha liberado permisos para su importación.
En 2018 México tuvo una superficie sembrada de algodón superior a las 240 mil hectáreas y casi un millón 700 mil pacas producidas. Pero desde entonces, las perspectivas de producción y siembra se han desplomado. En 2019, la producción se redujo a 220 mil hectáreas, principalmente con semilla de los inventarios de Bayer CropScience y BASF, principales proveedores en México. Pero el año pasado, la superficie disminuyó a 146 mil hectáreas, en su mayoría de algodón convencional, que necesita un mayor uso de agroquímicos contra plagas y maleza, reduciendo los rendimientos y rentabilidad.
Actualmente, se espera la dictaminación de solicitudes de importación de la tercera generación de semillas con nueva tecnología, que ofrecen resistencia a insectos y tolerancia a herbicidas foliares y pre-emergentes. Se encuentran en fase de desarrollo características novedosas como la tolerancia a la sequía, lo que permitirá un cultivo más sustentable en el manejo de control del agua, pero no hay optimismo.
México tiene la capacidad para producir las 2 millones de pacas que demanda cada año, pero por ahora los compradores tendrán que adquirirlas en USA por cerca de $395 Dlls. c/u, su mejor precio desde abril del 2009.
Algodón